sábado, 9 de abril de 2011

TRES DE TRES

Y entonces me dijo... -solo necesito encontrar un piso nuevo, nada, nada me ayudaría más que salir de esa cloaca-
Deseaba alejarse de los fríos inviernos en aquella casa, de sus ojos azules, llenos de odio, mirandola fijamente, perdido en su sinrazón, cuando después de tres días, sin tener noticias de él, aparecía apestando a alcohol y a flores secas, y ella le pedía explicaciones, el arrepentimiento venía después, 30 minutos más tarde el pez se volvía morder la cola.
Yo la escuchaba día tras día, una vez más sentadas en el sofá con una taza de café yo y un té con leche ella. Siempre el mismo discurso, los mismos hechos con distinta fecha de entrega, pufff, la de veces que la hubiese pegado dos tortas para hacerla reaccionar, pero ella seguía , en el fondo, pensando que todo cambiaría un día; que se levantarían ambos a una hora prudente, juntos desayunarían café con tostadas y que una vez hechas las maletas viajarían a Madrid para encargar muebles nuevos de Ikea... Yo no sabía como decirle: - estás en tu burbuja querida, por más que te diga y me cuentes, no te crees ni tú eso que me comentas-
- Tengo que encontrar un piso nuevo, ser independiente, alejarme de esta pesadilla-
A mi las cosas no me iban tampoco demasiado bien, creo que quizás no supe verlo a tiempo y como ella yo también vivía una fantasía...Me habían roto el corazón, una vez más y encima "a la chita callando", creo que fui demasiado discreta, hasta que ya no pude más y ahora era yo la que pedía consejo a otra amiga en común que, casualidades de la vida, como tres siamesas, se encontraba en las mismas.
Como tres almas en pena, nos refugiamos en el lamento, cada loca con su tema y cada mochuelo a su olivo al caer la noche, después de tres pintas de cerveza y un paquete de cigarrillos...
Los fines de semana nos dábamos nuestros homenajes, sesión de tragicomedia, llorábamos a carcajada limpia y reíamos a lágrima viva, era una dulce rutina, el pan de cada sábado... domingo... Hablábamos del amor, del redentor , de lo imposible.
Han pasados muchos años y muchas cosas desde entonces y no pasa un solo día en el que no me acuerde y sonría al recordar esa época de nuestras vidas, a pesar del dolor... cada una cogió su burbuja y voló con ella a otra parte... jugaditas del destino... una y otra vez... que nos obliga a ponernos la vida por montera...


Dedicado a vosotras... gentetriste.... genteilustre

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